Soy mi libro, me reescribo, me subrayo, me agrego páginas, me arranco otras que duelen y dejo en blanco una última hoja, siempre.

Viernes 08 de Junio

Soy mi libro, me reescribo, me subrayo, me agrego páginas, me arranco otras que duelen y dejo en blanco una última hoja, siempre.

Me gusta comparar mi vida como forma de vivir, de ser y de actuar con un libro, me puedo reescribir, cambiar todo lo que considere negativo, me subrayo, resalto lo más importante de mi, mis cualidades, descubriendo más con el paso del tiempo, me agrego páginas, no vivo de recuerdos, ya que haciendo esto me condeno a vivir en el pasado, creo nuevos momentos, haciendo de mi presente uno mejor, uno digno de recordar, también me arranco hojas, olvido, supero lo que es dañino para mí, momentos, personas que afectaron mi vida y...duele, sin duda duele, pero duele más poner la felicidad de la otra persona  antes que la de nosotros mismos, la más importante, la necesaria, la que solo de nosotros debe depender me leo y me vuelvo a leer, una y otra vez analizo mi vida para darme cuenta por mi misma lo que debo cambiar y qué no, al final siempre dejo una hoja en blanco para así quien marque mi vida, deje la huella o simplemente para separar lo bueno de mí de lo que no es tan así.
Pero sin importar qué, seré un libro fuerte, de esos que aguantan el uso y el desuso, soy y seré un libro abierto, pero si algo sin duda no permitiré, es que cualquiera escriba en mí.
Si no soltamos el pasado, nos distraemos del presente perdiendo así el futuro, aprender a soltar es lo esencial para ser feliz, no podemos aferrarnos a falsas ilusiones, falsos amores, falsas amistades, falsas personas, la vida es una y la debemos disfrutar, no amargarnos la vida con personas tóxicas, que no están tan dispuestas hacer de nuestra vida una mejor, una más bonita con su presencia.