Lunes 06 de Agosto
Siglo 21, siglo de innovación.
Al transcurso de la historia el ser humano ha explotado o intentado explotar su potencial, ha hecho maravillas, desde lo artesanal hasta descubrir curas para las enfermedades que en un tiempo llegaron a ser incurables, es sorprendente si nos ponemos a ver desde cierto punto todo aquello que puede lograr el ser humano y el potencial que aún también se tiene sin explotar.
¿Cuántos no estuviesen muertos si no se hubiesen encontrado curas? ¡MUCHOS! de eso estoy segura, si duda alguna Dios sabe cómo hacer sus cosas, gracias le debemos de dar cada día por regalarnos la misma y todo el potencial que sin duda cada uno de nosotros tiene.
Somos especiales y no sólo lo digo porque claramente como se puede observar en estas líneas me estoy incluyendo en esta cualidades, especiales porque Dios así lo quiso, lo quiere y lo querrá.
Él decide nuestro futuro, lo que pasa en tu vida tiene un propósito así tú no lo creas, así dudes muchas veces de esas palabras, es tal cual lo escribo.
El tiempo de Dios es perfecto, todo pasa cuándo, dónde y cómo tiene que pasar, exactamente todo lo que pasa, pasa porque así es su voluntad.
Cuando pienses que todo lo que pasa está mal, no le reclames a Dios, examínate, algo estás haciendo mal y aún no lo sabes o no lo quieres ver.
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